Nada puede resumir mejor la obsesiva cultura de las redes sociales que predomina hoy en día, que la frase “se trata de mí, me refiero a ti, me refiero a mí” con la que Kim Kardashian aparecía hace casi una década en la portada de la revista W y con la que la celebridad conmemoraba los primeros 30 años de su existencia.
El contexto no era tan sencillo.
Nos guste o no, la razón principal de la fama de Kim Kardashian en aquellos días era su desnudez.
En 2007 se filtró por la web su video teniendo relaciones sexuales con el cantante Ray J, en octubre de ese año nacería el reality show “Keeping Up With the Kardashians” que ha estado al aire por más de 13 años.
Luego, en diciembre de ese 2007, Kim posó desnuda en la edición navideña de Playboy.
Tres años después, W magazine lanzaba la edición de noviembre 2010. En las páginas interiores había fotos tomadas por Mark Seliger, mostrando una orgullosa Kim Kardashian vestida orgullosamente “con nada”, excepto pintura corporal plateada en algunas de las tomas.
"Lamento haber hecho Playboy. Me sentí incómoda", dijo para W. Pero aparentemente escuchó los consejos de su madre, Kris Jenner, quien le dijo: "Hazlo y tendrás estas hermosas fotos para mirar cuando tengas mi edad". Kim tomó consejos pero unos meses después mostró arrepentimiento.
Como decía el texto de W: “Kim Kardashian no puede cantar, actuar ni bailar, pero ha encontrado el papel de su vida en el fino arte de interpretarse a sí misma”. El principal papel de ella parecía el drama.
Y es que se desató un escándalo por los comentarios vertidos en uno de los episodios de "Kourtney & Kim take New York", pues de acuerdo con Kim las fotos parecían pornográficas y se veía más desnuda que en Playboy. El llanto de Kim brotó al ver las imágenes en preview de su teléfono celular, pues de alguna manera había pensado que las zonas íntimas serían oscurecidas o cubiertas con letras, lo cual al parecer no sucedió. Sin duda estábamos ante uno de las primeras "rompeduras de internet" como se ha denominado cada vez que una celebridad enloquece las redes sociales.
Como decíamos, ha pasado una década de aquellos acontecimientos y aunque la vida de Kim ha dado muchas vueltas, ella sigue siendo ese ícono que obsesiona a nuestra generación. Y ahora al darle una vuelta a la tuerca, han surgido algunas fotografías de aquella mítica sesión, en las que podemos mirar el esplendor manchado por la pintura gris. Si nos dan a elegir, preferimos estas últimas fotos.
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